Después de lo de mi querido José y su hermana me quede muy triste, pero por suerte tenia a mis hermanos. Era gracioso vernos, los cinco íbamos por las calles de
Logroño agarrados de la mano, siempre juntos. En el internado había un enorme comedor, teníamos gimnasios y teníamos un teatro. Recuerdo una vez que prepararon unas actuaciones para los padres de los niños.
Según la edad hacíamos una cosa diferente yo recuerdo que me toco salir disfrazada de cocinera, llevaba un gorro que era mas grande que yo y me pintaron unos coloretes,
jeje, que graciosa que estaba, no recuerdo que es lo que hice pero si lo que llevaba.
A mis hermanos les mandaron hacer una actuación musical. Salíamos a la calle y hay estaban practicando para su baile yo practicaba con ellos y llego la hora de que salieran, iban
guapisimos.
Salieron totalmente disfrazados con sus guitarras, etc. Al rato les tocaba ya el baile que tanto practicamos y yo sentada mirándoles con total
admiracion. Y como era una niña, no se me ocurrió otra cosa que subirme al escenario y me puse a bailar con ellos. A la gente le encanto, todo el mundo se puso en pie y yo feliz mire entre el publico. Buscaba a mi madre y a mi padre y como era lógico no estaban. Cuando todo acabo los padres se reunían con sus hijos, nosotros nos quedamos solos nadie había venido a vernos. Hay me di cuenta de que no nos querían que estábamos solos pero juntos, algo es algo. Los años pasaron y te acostumbras a los internados es tu casa.
Nos vacunaban, cosa que me daba terror, nos mandaban lavar nuestros bañadores para poder ir a la piscina al día siguiente, bueno muchas normas que había que cumplir. También
estudiamos allí, lo teníamos todo, menos lo mas importante alguien que nos diera su calor su cariño y ese beso de buenas noches que yo tanto ansiaba.
Cuando me quedaba poco para hacer la comunión me ocurrió algo que me transformo la vida, algo que hoy en día no he podido olvidar. Eramos muchos niños en el internado y no había ningún control de nada. Un día de repente oigo que me están llamando por los altavoces, a mi y a mis hermanos. Teníamos visita eran mis
papás que ilusión me hacia, pero yo no podía salir de donde estaba, solo oía mi nombre una y otra vez y yo sin poder ir. Al cabo de un rato conseguí escapar y subí escaleras arriba a toda prisa y en esto me encontré con una de las monjas que estaban allí. Y esta me dijo: -¿ Donde estabas? ¿ Como estas tan sucia? que mal
hueles. M e agarro fuertemente del brazo y me dio una bofetada en la cara y otra en el culo. Sube arriba,
duchate ponte el pijama y vete a la cama te quedas sin cenar y sin ver a tu madre. Y o no quería miraba tras de mi y a lo lejos, mientras esta me arrastraba por el pasillo, logre ver a mi madre con mis hermanos. Llore de rabia y dolor y me quede sin verla y sin poder explicar que me paso.
Después de ese día me transforme en una niña mala. No estudiaba, insultaba a las monjas en fin pasaba de todo. Mi hermano el mayor era el que me decía lo que estaba bien y lo que estaba mal. Yo le hacia caso pero al que mas quería era a mi tato Andrés, eramos como uña y carne.
Llego el
día de mi
comunión estaba contenta porque
iba a ver
por fin a mi mama. Me pusieron un vestido horroroso, tenia rayas grises por todos los lados en fin
pésimo. S
alíamos de dos en dos y todos los familiares ya estaban sentados. Yo tenia una sonrisa resplandeciente cuando estaba cerca del cura mire a mi alrededor en busca de mama pero no la vi. Me
invadió una gran tristeza ni siquiera esta vez a venido. Cuando acabamos, fuimos al comedor y para sorpresa
mía hay estaban
sonreí y fui corriendo a los brazos de mis padres. Todo
transcurrió mas o menos bien hasta que me puse celosa. Me enseñaron las fotos de mis dos hermanos mayores el
día de su
comunión, estaban
guapisimos y que regalos les dieron. Yo estaba impacienta por ver mi regalo. Cuando de repente saca mi padre una bolsa de
plástico y me la da era una bolsa llena de
chuches que mierda, me puse muy triste
pensé que me
darían una pulsera o una cadena para llevarla siempre conmigo pero no. Mi padre me llevo con el coche a dar una vuelta con el coche a mi me encantaba, me
ponía música y yo feliz. Llego la despedida y yo no
quería:
sacame de
aquí llevame contigo mama. vi como se iban mientras yo lloraba porque sabia que no la
volvería a ver mas.
y
así fue no la
volví a ver nos abandono, pero ¿porque?, ¿que hemos hecho mal?